¿Qué son las camillas de rescate y qué modelos existen?

La camilla de rescate o también conocida como de emergencias es un sistema de transporte, traslado y/o evacuación de personas heridas o que necesitan ser atendidas por causa de un accidente. Las hay de todo tipo y materiales, cada una de ellas diseñadas y fabricadas para determinadas situaciones de emergencia y asistencia a pacientes, que pueden requerir un tipo de atención u otro. Además, de este modo se facilitan y aseguran las labores de rescate de los profesionales y técnicos de emergencias. ¿Conoces todos los tipos, así como el uso de cada uno de ellos? En función de la situación y el estado del paciente, se deberá usar una u otra.

¿Qué importancia tiene la camilla de rescate?

Cualquier establecimiento público o privado debe contar con una camilla de rescate y/o emergencias, ya que, pese a todas las precauciones, un accidente no se puede predecir. Ni cabe mencionar que, todos los equipos de emergencia están equipados con varios de estos dispositivos, para poder solventar con total garantía cualquier situación de rescate. Y es que, se trata de un producto de vital importancia, ya que ofrece la posibilidad de trasladar al paciente sin ocasionarle más problemas, incluso más dolor. De hecho, normalmente tienen sistemas de inmovilización, para evitar que la lesión se agrave, a causa de un mal movimiento en el transporte del paciente.

¿Qué tipos o modelos existen?

El abanico es muy amplio, ya que las situaciones en las que son necesarias son muy complejas y variadas. A continuación, detallamos las más destacadas del mercado actual:

• Camillas nido

Están totalmente preparadas para los rescates en una situación compleja y/o extrema, como los acuáticos o verticales, que necesitan una elevación horizontal del suelo. Del mismo modo, están diseñadas para asistencias rápidas, como en la mayoría de deportes, o en las que haya que evitar golpes laterales.

Uno de los modelos más destacados más destacados del mercado actual es la Spencer Shell, que ha sido diseñada para las situaciones más difíciles. Por ejemplo, es ideal para minas, las alturas o el mar. Su robustez y flexibilidad de uso, la han convertido en una de las más solicitadas por los técnicos y profesionales.

• Camillas cuchara

Su función es levantar a los pacientes del suelo, totalmente inmovilizados. Es decir, se utilizan para levantar a la víctima y situarla en un colchón de inmovilización y/o sistema de transporte de ambulancia, para su posterior traslado al hospital o al centro médico. Las hay de 2 y 3 hojas, teniendo la posibilidad de separarse y unirse por sus extremos, facilitando las maniobras sanitarias de los técnicos, ya que ofrecen la posibilidad de elevar al paciente del suelo sin la necesidad de moverlo.

Normalmente, su uso se realiza en espacios reducidos, puentes elevadizos o cuando la víctima debe moverse de forma inmovilizada. También, es recomendable que sea utilizada entre 2 o 3 profesionales.

Uno de los modelos más demandados del mercado es la Spencer SX-R de 2 y 3 cuchillas, que incluyen 3 correas de inmovilización. Su silueta ha sido estudiada para optimizar su colocación bajo del paciente, adaptándose a su ergonomía, permitiendo estabilizarlo en el momento de transporte.

• Plegables

Las camillas plegables ofrecen un plus en su almacenamiento al ocupar menos espacios. Por ello, suelen ser las elegidas en eventos de mucha gente, gracias a que se pueden guardar el cualquier lugar. Su precio suele ser más reducido. Además, está la alternativa de las lonas portaheridos, que también facilitan el transporte y la evacuación de pacientes. También las hay que se pueden convertir en sillas de traslado, muy utilizadas en espacios reducidos y escaleras.

Algunas de las más destacadas son la Spencer 122, Spencer 200, la Total, la Hirvin - lona porta heridos, o la Wow, lona de evacuación con reposapiés. Se trata de productos totalmente certificados que cuentan con toda la documentación requerida por las altas entidades europeas.

• Tableros espinales

Los tableros espinales son dispositivos rígidos que permiten el transporte y la inmovilización de los pacientes. La fijación e inmovilización del paciente, mediante correas, ofrece la posibilidad de traslado incluso desde condiciones extremas, como los rescates acuáticos o en altura. Además, permiten la colocación de sistemas de sujeción de cabeza y piernas, ofreciendo mayor seguridad al paciente y facilidad en las labores de los técnicos.

Algunos de los que presentan un mayor reclamo por sus funcionalidades y garantías de uso, son el Tango, al ser un tablero espinal para adulto y pediátrico, el B-Bak Pin y el Rock Pin, que gozan de grandes características diseñadas especialmente para las situaciones de salvamento.

Camillas de ambulancias

Las camillas de ambulancias son los dispositivos más utilizados en los accidentes producidos en carretera, y en aquellas situaciones en las que el terreno permita desplazar al paciente sin problema. Se suelen dividir por sus prestaciones y características:

• Con plegado automático: Dispone de un sistema de plegado de ruedas y de fijación a la ambulancia automático. De este modo, se convierte en fija una vez está dentro de la ambulancia, permitiendo un traslado más seguro y cómodo para la víctima. También suelen tener la capacidad de separarla de la estructura.
• Sin plegado: Es similar a la de plegado automático, pero sin esa condición.
• Camilla y silla para ambulancia: Tiene la capacidad de convertirse en silla, facilitando el transporte en hogares, especialmente en aquellos que tienen ascensor o los accesos son de pequeñas dimensiones.

¿Qué accesorios se pueden añadir?

Una gran variedad de productos complementa las funciones de estos sistemas de transporte, optimizando su uso. Entre los más comunes están los cinturones, las mantas térmicas, las correas arañas, los inmovilizadores de cabeza y pies, los sistemas de arnés de elevación, los flotadores acuáticos, los sistemas de fijación a ambulancias y las bolsas para su traslado y almacenaje.

¿Cómo asegurar al paciente en el traslado?

El primer paso es inmovilizar a la víctima con las correas de sujeción. Posteriormente, hay que hacer lo mismo dentro de la ambulancia, situándolo con la cabeza en la misma dirección que la parte delantera del vehículo. Del mismo modo, realizar la elevación y transporte con cuidado y atención, para no generarle ningún tipo de molestia o dolor, que pueda agravar la situación y su estado de salud.